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ARCHIVO HISTÓRICO AGUILAR Y ESLAVA

BIBLIOTECA HISTÓRICA AGUILAR Y ESLAVA

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03.06.19

Archivo Histórico de la Fundación Aguilar y Eslava

DOCUMENTO DESTACADO:

Primer edificio del Real Colegio: Casas de la morada del fundador Aguilar y Eslava (1680)

Antonio Suárez cabello

El proyecto de digitalización del archivo histórico de la Fundación Aguilar y Eslava, para su incorporación a PARES (Portal de Archivos Españoles) del Ministerio de Cultura, nos depara importantes documentos de lo que han sido los 340 años de vida de esta institución, premiada recientemente con la Medalla de Andalucía 2019.

Traemos en esta ocasión, como DOCUMENTO DESTACADO, dos cartas manuscritas en el mismo pliego: la una firmada por D. Luis de Aguilar y Aranda; la otra (la contestación), por el duque de Sessa y Baena, conde y marqués de Távara.

En su testamento, el licenciado D. Luis de Aguilar y Eslava dispuso que el edificio para el Colegio se labrase en las casas de su morada, “en la calle D. Diego de Avís, linde con casas de D. Francisco de Córdoba y en otras casas que tengo compradas a la linde y se compre otras para dicho efecto, y si a los superintendentes que he nombrado no les pareciere a propósito compren sitio en la parte y lugar que les pareciere más conveniente para la dicha fundación y la hagan en él como más gusto les fuere”.

Con fecha 30 de octubre de 1680, D. Luis [Gómez] de Aguilar y Aranda -primer patrono, licenciado en jurisprudencia, corregidor de la villa de Rute, alférez mayor de Cabra y juez de apelaciones de los estados del duque de Sessa, natural de Cabra- dirige un escrito a D. Francisco Fernández de Córdoba y Pimentel señalando que hace unos días se dirigieron a dicho duque de Sessa los superintendentes del Colegio que fundó su tío, indicando que, ajustándose a la voluntad testamentaria, habían acordado que el Colegio se hiciese en las casas que habían sido morada del fundador, esperando que lo tuviese por bien u ordenase lo que fuese mejor.

En el documento se habla de la compra de las casas de D. Francisco de Córdoba y otras que se necesitan para la fundación del Colegio, y piden que el sitio sea el de “la calle de D. Diego de Avís, que da vista a la placeta”. El patrón de sangre solicita la benignidad del duque de Sessa.

La respuesta se da en el margen izquierdo de la primera página del pliego: “Visto lo que decís en cuanto a la fundación del Colegio […] me parece muy bien el sitio que me decís para dicha fundación”, diciendo al final que “conviene se concluya cuanto antes la fundación”. La carta está fechada en Madrid, el 5 de noviembre de 1680. El original se encuentra encuadernado junto a las actas de la Junta de Patronato correspondientes a los años 1679 a 1681.

La firma pertenece a Francisco Fernández de Córdoba y Pimentel (1626; 1688), hijo de Antonio Fernández de Córdoba (a cuya muerte en 1659 heredó los títulos de duque de Sessa, de Soma y de Baena, conde de Cabra, de Palamós y Grande de España), y de Teresa Pimentel, hija de los duques de Benavente.

Francisco Fernández de Córdoba y Pimentel es, por tanto, VIII duque de Sessa y X conde de Cabra.

Un año después de iniciadas las obras se le presenta a la Junta de Patronato la ocasión de comprar el edificio que llamaban la ‘Casa Grande’, frente a la ermita de la Soledad, propiedad de D.ª Leonor de Moscoso y Rojas, condesa de Cabra. De la adquisición de este inmueble, donde se ubica el actual Instituto y la Fundación, nos ocuparemos en otra ocasión.

ARCHIVO HISTÓRICO DE LA FUNDACIÓN AGUILAR Y ESLAVA:
01.02 Fundación-Patronato Aguilar y Eslava
01.02.01 Junta de Patronato
01.02.01.0001 Actas Junta de Patronato (1679-1681)
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